De regreso a Octubre

¡Lealtad lo que se dice lealtad!

Se conmemoró el pasado 17 de Octubre el día de la lealtad en la región, pero los actos recordatorios estuvieron a punto de suspenderse porque casi nadie sabía con certeza en que consistía la lealtad en materia política. Por suerte un niño les prestó a los políticos un diccionario Larrouse, pero el pobre infante se fue llorando a su casa porque no le quisieron devolver el libro y hasta hubo un funcionario que le sugirió al pibe que para recuperarlo pronto tendría que pensar en alguna compensación, un diego. ¿Vos sabés pibe no?
La primera conclusión a la que llegaron fue que lealtad significa ser fiel a un tipo que se murió hace mucho tiempo y por lo tanto no puede cuestionarles nada , ni decirles “dejen muchachos no sean más leales, conmigo”.

Esta primera reflexión sobre el recuerdo del día generó las primeras reacciones de parte del vocero de los “Herederos de los descamisados”.
¿Que es eso una murga? Preguntó un viejo que tenía la marcha peronista de Ring Tone en su celular.
“No los Herederos de los descamisados, es el nombre de una agrupación de jóvenes militantes que reivindican la mística del 17 y a nuestro líder espiritual el general Mc Arthur, y a su compañera de batallas en la defensa de los pobres, la joven y eternamente bella Scarlet Johansen”. Afirmó el vocero.
¡No ese era imperialista! Respondió el representante de la agrupación PC
Peronismo Cibernético “El verdadero héroe es... ¿cómo se llamaba? Si yo lo vi en la canción de los parecidos de TVR. Ese hombre joven que usaba boina oscura, con barba tupida, esa mirada soñadora y el habano en la boca, ¿cómo era el nombre de ese Guerrero? ¡Ya sé el Raly Barrionuevo!

“Pido la palabra” gritó desde el fondo uno de los integrantes del comando revolucionario Redondito-Peronista, cuyo lema de batalla era“Si Evita viviera sería Ricotera”.
“Nosotros seguimos el legado de nuestros líderes Eva Duarte y el Indio Solari. Y a todos los gorilas anti peronistas y a los gordos de la CGT sólo les decimos que “El infierno está encantador”. Y les recordamos que la revolución Redonda y Peronista sigue adelante de la mano del Capitán Buscapina, noble lugarteniente de la causa popular.”

Le siguió el representante de Unión de Distribuidores de Camperas de Cuero a precio de costo, Juan Domingo Guarnaccia, que trajo la noticias de que se estaban vendiendo como pan caliente en la reunión las mencionadas camperas, icono de la militancia sindical peronista. No sin antes remarcar a los presentes que todo lo recaudado sería destinado a las colonias de vacaciones en el balneario municipal para todos los hijos de los compañeros.

A su turno habló uno de los representantes de la línea más dura del peronismo conservador, quién arremetió diciendo “Compañeros la única izquierda que vale la pena es la de Leonel Messi”. Con esas palabras adhirió a la ordenanza municipal que prohibía el giro a la izquierda en las calles principales de la ciudad.
“Nuestros compañeros concejales nos están dando el rumbo político al sancionar esta ordenanza. Conserve su carril derecho reza un sabio cartel a la veda de la ruta. Estas son las señales que nos están dejando nuestros hombres más sabios, sigamos por la senda marcada, la derecha siempre la derecha y a la diestra del Señor.”

¡La única lucha que se pierde es la de 100% lucha! Con esta frase avanzaba hacia el palco la pancarta de la Juventud Peronista que había convocado al acto a través del MSN. El representante pidió el micrófono y se dirigió al público “Comp. Nos est X la Rev y en contr Dl Capt”.
“Viv Per Carjo”.
Los afiliados justicialistas aplaudían mientras se miraban entre ellos, encogían los hombros como no entendiendo bien hasta que el maestro de Ceremonia Leonardo Favio los arengó. “Aplaudan compañeros a la nueva militancia”.

Desde el fondo del salón se escuchaban los bombos y los redoblantes que anunciaban la palabra del principal orador de la noche, un verdadero devoto de la liturgia Peronista.
“El padre Gramsci” anunció el locutor.
Rápido de reflejos rectificó “el padre Julio Grassi”. El hombre santo tomó el micrófono y dijo “yo me siento orgulloso de ser Peronista-Menemista, amo la causa popular, amo a los hombres y Mujeres del partido, y tengo una especial debilidad por los chicos” aseguró.
Parecía que su discurso iba a ser corto pero de pronto el párroco caído en desgracia se emocionó y continuó su relato, al tiempo que se iba desprendiendo de su sotana, por causa del calor de las luces del escenario, suponían los organizadores del acto. Entonces el padre dijo.
“Los chicos son el futuro por eso hay que fijarse en ellos y prestarles atención en todo momento, cuando duermen cuando se bañan y cuando vienen de jugar a la pelota, con el cuerpo todo sudado y la camiseta que se les pega al pecho. ¡Ah!”.

Finalmente tomo la palabra el delegado gremial del sindicato de paseadores de perros, quién afirmó “Cada vez que andamos en la plaza con los Pit Bull, los Rotwailler, Pedigree, Dobermann, Mastín Napolitano, Tosa Japonés, Dogo Argentino, Dogo de Burdeos, Bullmastiff, Staffordshire, de Presa Canario y Fila Brasileiro, pensamos en la doctrina Peronista y en combatir al capital y al imperialismo.”
Un aplauso cerrado colmó la instalaciones lo que provocó los nervios de los perros que empezaron a morder a todo el que tenía delante. Rápidamente los compañeros paseadores sacaron de sus bolsillos los silbatos para canes y como si se tratara de una remembranza del Flautista de Hamelín comenzaron a tocarles la marcha y a desconcentrar en correcto orden con sus perros detrás en una conmovedora retirada, que era saludada por el resto de los concurrente que seguían a los perros en franca retirada, al tiempo que levantaban sus dedos índice y mayor en señal de V, mientras emocionados gritaban.
“Mi General cuanto vales”.